El cerro el Pital, una montaña ubicada entre las fronteras de El Salvador y Honduras, en San Ignacio, municipio de Chalatenango.
Se encuentra a 2730 msnm y es el punto más alto de El Salvador y el tercero más alto de Honduras
El Pital es un pico montañoso de impresionantes laderas
escarpadas, bosques de pinos y coníferas y un clima frío delicioso!
Con mis amigas decidimos que era momento de aventurarse un poco
dentro del país y decidimos “mochilear” de forma interna.
La primera parada fue la terminal de oriente, en donde a
buenas 4:30 am ya estábamos en pie esperando un bus que nos llevara hasta San
Ignacio Chalatenango
Una vez llegamos a San Ignacio empezamos a buscar opciones
para subir hasta el Pital porque normalmente solo sube un bus por la mañana de San
Ignacio hasta río chiquito y luego se debe caminar a aproximadamente 6 kms de
río chiquito hasta el Pital.
Dado que el bus se había arruinado ese día, empezamos a
pedir jalón a los pick ups que iban
subiendo hasta río chiquito desde donde habíamos pensado caminar. Pero tuvimos
mucha suerte y encontramos un señor que nos llevó hasta el propio el Pital .
Una vez en el Pital , se paga la entrada del sitio con
derecho a acampar ($5.00) y empezamos a buscar una zona donde pudiéramos poner
nuestras tiendas de campaña con una
buena vista y espacio suficiente para
una fogata.
También tuvimos la oportunidad de aventurarnos al llegar
hasta la cima del “Peñón de Cayaguanca” ( o
"Piedra que mira a las estrellas”)
que es el punto más alto del Pital. Llegar hasta aquí necesita una dosis
extra de adrenalina y superar el miedo hacia las alturas, ya que para legar al
otro extremo de la montaña, se hace a través de un tronco de un viejo árbol que
cayó entre las dos laderas y permite el cruce de las personas de un lado a
otro.
El Clima en las noches es muy frío y húmedo, por lo que es
importante llegar preparado con ropa abriga y una tienda de campaña que resista
la humedad porque el rocío de la madrugada se cuela y puedes llegar a pasar una
MUY mala noche porque las temperaturas descienden mucho por las madrugadas.
Realmente es uno de los lugares más bonitos para visitar en
el país.
“… la sensación de calor ante los rayos de un sol muy
limpio, asomado,
como el rostro de un niño travieso, entre dos picachos de
montaña.
Luego, pinos, muchos pinos, enormes, de los cuales
tan solo memorizo las poderosas raíces
hundiéndose en la tierra hacia el mundo
misterioso de la oscuridad húmeda y profunda.
Y allá, arriba, ese otro misterio de la altura,
mezcla de azul, de dorado, de blanco…”
( Moassy , el perro – Jorge Angel Livraga)