martes, 15 de noviembre de 2011

Alas en mi sombra

"Lo recuerdo con una nitidez atroz...
dicen que cuando cayó la bomba atomica en Hiroshima las sombras
quedaron grabadas en los muros sobre los que se proyectaban...

pues todo lo que ocurrio durante nuestra bomba atomica
tambièn a quedado grabado con cincel en mi memoria"

("Delirio" - Laura Restrepo)

Tuve un sueño bastante extraño. Tratare de resumirlo de la mejor forma que pueda.

Recuerdo que estaba sentada en X lugar y de pronto miraba hacia un muro, en el muro se reflejaba mi sombra y de mi sombra salían una alas enormes y hermosas como de hada. Lo extraño era que solamente se veían en mi sombra y aunque me encantaba verlas en el reflejo, me desesperaba que no me las podía encontrar sobre mi espalda.


Recuerdo que le preguntaba a la gente si podían verme las alas, pero nadie podía verlas y me veían extrañados por mi insistencia y mis preguntas, entonces comprendí que solo yo podía verlas.

Comencé a tocarme insistentemente la espalda al mismo tiempo que veía sobre la pared como las alas de mi sombra se desplegaban elegantemente, cada vez más grandes y hermosas.

- Hasta aquí el sueño era hermoso-

Lo siguiente que recuerdo es la sensación de cierta inquietud que me provocaba el que solo yo pudiera ver eso, así que fui donde mi mamá a preguntarle si ella podía ver algo extraño sobre mí y ella solo negaba rotundamente con la cabeza.

De pronto, en algún momento de mi sueño, me encontré en otro lugar y escuchaba que me enviaba a encender una luz de una habitación que se encontraba dentro de otra habitación. La primera habitación era enorme y estaba muy oscura, yo no quería entrar pues me daba miedo, la única iluminación que había era la poca que entraba por la puerta.

Casi a empujones entre en aquella primera habitación, la luz que entraba proyectaba sombras sobre las paredes; me quede un momento de pie, ahí, observando las sombra y de pronto empecé a ver como las sombras cobraban vida. Eran sombras fantásticas, figuras de duendes, hadas, hojas gigantes, helechos, etc. Las sombras danzaban y brincaban sobre la pared y yo intentaba buscar de donde salían, pero las sombras no salían de ninguna parte, simplemente estaban ahí. (esto me recordó mucho al mito de la caverna de Platón ).

Al ver que las sombras eran de hadas y seres así ya no me dieron miedo y me acorde que yo tenía mis alas, entonces me puse como de perfil para que la sombra se reflejara y mis alas se desplegaron hermosas, en ese instante las sombras dejaron de danzar y se me quedaron viendo. Entre sin temor a la habitación y me dirigí a la siguiente habitación (que estaba dentro de esta misma), encendí la luz – que era a lo que me habían mandado - y empecé a salir. Cuando estaba a punto de salir las sombras me empezaron a jalar y no me dejaban ir.
El miedo se apodero de mi, quería liberarme y empecé a gritar, nadie me ayudaba...


Me desperte.

2 comentarios:

  1. Hada-Luciérnaga,la próxima vez que tengas que entrar en la caverna, asegúrate de encender tu luz. :)

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